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June 29, 2011

Lima Rock City - Renzo Núñez Melgar (Reve)

Du poil sous les roses (2000)
Directed by Agnès Obadia et Jean-Julien Chervier

Obadia & Chervier's film confronts teenage sexuality through the analysis of contemporary society's demands. Every aspect of life demands now utter success; and sex has become yet another facet in which one must either triumph or perish. "Du poil sous les roses" focuses mainly in two characters: Roudoudou, a lightheaded and cheerful girl who is preoccupied with sexual matters that no one can answer plainly. School education is not fit to the inquiries of young minds; the expert's opinion (in this case her gynecologist) is too cold and detached from the actual sexual act. The other character is 15-years-old Romain, a seemingly reclusive boy whose only friend is the son of her mother's lesbian partner.

Our vision of sex has evolved and devolved throughout time. Sex has been interpreted from a healthy perspective of tolerance in Ancient Greece and in the first two centuries of the Roman Empire, to a more restricted or condemned approach in medieval times; it has even been a force that needed to be subjugated and canalized into the path of prosperity and production in the Victorian Age. Nonetheless, sex is today as complex as ever, perhaps even more complicated as this film suggests.

Jacques Lacan's followers have theorized that in contemporary society the individual has become the main and sole purpose of the being, whereas in past times a social group or even a shared idea would have been of paramount relevance. The individual, of course, must be defined negating the other. Thus, contemporary approach to sex consists in nullifying the otherness of the sexual partner. Sex is no longer an intimate or powerful moment, but rather the reification of the individual's Lacanian imperative of jouissance. The film provides more than enough arguments to uphold this analysis.
Claudio Gallina
As philosopher Alan Badieu explains, we live in a society of symptom and simulacrum. Sex is a powerful act and as such is deemed dangerous, so the only way to get rid of it is through simulacrum. Certain forms of contemporary pornography nurture the simulacrum to the point it becomes more important than sex itself. In "Du Poil Sous les Roses", the viewer witnesses yet another form of simulacrum, although a saner one, in two scenes: during the first one Roudoudou overhears his brother having "sex phone" with her best friend. In the second one, Roudoudou catches Romain in the middle of a "sex call". Although in the movie the strength of the simulacrum lingers on so fiercely that sex is replaced and no real intercourse takes place (in fact sexual intercourse between the boy and the girl will become an excruciating moment they cannot surmount easily). The symptom symbolizes the discontents of civilization, and as such here the heterosexual normative works only to seclude Romain and his male friend from accepting motherly lesbianism or even homosexuality. As it can be seen in the mutual masturbation scene between the two boys, homosexuality is quickly dismissed as a valid option. What do the directors try to tell us with this? Perhaps that in a world saturated with information we no longer seek the truth, we just comfortably adapt ourselves to the simulacrum laid ahead in front of us. Even after all the stimulus teenagers currently get, their knowledge about sex still doesn't amount to much.
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Cuadros en el taller de Reve

Cuando llegué alrededor de las ocho a la Sala de Arte de Viajes El Corte Inglés el lugar estaba repleto. Renzo Núñez Melgar Vega (Reve) había convocado una gran cantidad de visitantes, quizá algunos atraídos por sus maravillosos cuadros y otros por el concierto de Dirty Black Brain, el grupo de rock integrado por Asad López de Castilla y el mismo Renzo. Conocí a ambos artistas en Barranco, hace unos meses, sin saber que compartían un taller en el mismo distrito. Y entre charlas y copas de vino en diversas galerías de arte, terminamos haciéndonos amigos.

Ellos fueron uno de los primeros en leer el segundo volumen de THE GATHERING y en darme sus comentarios y opiniones sobre mis páginas. Al visitar su taller he sido testigo del trabajo continuo del artista. Efectivamente, durante los últimos meses Renzo estuvo pintando mañana, tarde y noche, literalmente casi sin respiro –desapareció, incluso, del circuito limeño de galerías– y se concentró en una sola meta: pintar los cuadros para Lima Rock City, la muestra que se inauguraba ayer martes.
Cuadro de Reve en proceso

A veces me he sentido un poco culpable al tocar la puerta del taller, sabiendo que interrumpía aunque fuese brevemente la labor artística. Pero ser testigo del proceso ha sido invalorable. Ahí he estado, en más de una ocasión, observando la paciencia y la dedicación de Renzo. Ahora, al ver todos los cuadros en un solo lugar siento algo más allá que el simple interés de un visitante anónimo.


Pero aunque no lo conociera, lo icónico de sus imágenes, la certera referencia al mundo del rock y de las estrellas famosas, la transculturación –gráfica, pictórica– de ese mundo que en sus cuadros aparece inserto en el centro de Lima o en las calles de Barranco serían suficientes para capturar mi atención. Y, sin duda, todos los que estuvieron anoche en la sala de arte miraflorina disfrutaron al máximo. Desde aquí, un aplauso.

Este martes también fue memorable por otro motivo. A las diez de la noche llegué a Dédalo, había tenido lugar la presentación del nuevo libro de Carlos Herrera. En el 2004, cuando tenía 19 años, fui por primera vez en la vida a Dédalo. Irónico que, a pesar de vivir en Barranco, ni siquiera había escuchado de ese espacio maravilloso hasta ser invitado por Germán Coronado, el editor general de Ediciones Peisa, a la presentación del libro de un autor que no conocía, en un lugar todavía desconocido, con gente que tampoco conocía. Recuerdo haber llegado a Dédalo hace siete años, con un poco de inseguridad al ver que todos allí me doblaban la edad y que excepto por Germán, no conocía a nadie. Pero, en esa primera visita, María Elena Fernández me vio y me saludó (se acordaba de mí del colegio y eso es un testimonio a su buena memoria), y desde ese entonces me ha seguido saludando durante ya siete años. 
Cuadro terminado (imagen tomada del catálogo de Reve)

No hay ningún centro cultural, ni galería ni espacio en Lima –y los conozco todos– que me haya acogido tanto como Dédalo. Hoy, es habitual quedarme conversando con María Elena y Eduardo Lores. Claro que las cosas han cambiado un poco, si bien antes, dominado por el pesimismo, me creía incapaz de protagonizar una presentación, hoy siento que publicar una novela ya no está en el lindero de la utopía (el u-topos, o sea, el no-lugar en griego). A regañadientes, he terminado siendo un poco más optimista de lo que hubiese imaginado. La novela que quiero, esa que anhelo, todavía no está terminada. Pero cuando esté, y se publique, la presentación será, por supuesto, en el extraordinario Dédalo de María Elena.

June 17, 2011

Michiko Aoki en la Galería Yvonne Sanguineti

Don’t jinx it. Yes, I know how that is. But I was so sure this time that I kept on telling everybody about this new job. I was going to work for the German Agency for International Cooperation. They offered me a good position and the pay was great. I was already making plans. I could see myself in the next comic convention, signing issues, drawing sketches. I had plans to travel, to buy original art, to do lots of things really. And suddenly it all came to a halt. I got the call this week, turns out due to some issues with the German offices my contract was no longer a go. And so I had to let go of my plans, at least for the time being. So yes, it’s been quite a discouraging week for me.

Anyway, as a curiosity I’m including a couple of frames from the story I drew for Cal Cleary. Because he had asked for 9 panels in each page, and I also had to draw another story for volume 6 I knew time was of the essence. So I decided to recycle, so to speak, one of my old drawings. You can see that the original piece includes partial male and female nudity. Obviously I had to redraw it digitally so that it would fit Cleary’s theme. The new digitized version served as a template for two frames. The first one, on top, was horizontal and it needed some elements that Cleary had suggested in his script. So I penciled it again and then I inked it. Finally, I scanned the image and added a few gray tones plus the lettering. And I used all of my previous work to finish the second frame, the one on the bottom. Evidently, there are differences in the details, so what’s your favorite?
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El día miércoles estuve en la inauguración de la muestra de Michiko Aoki en la Galería Yvonne Sanguineti, me encontré con Marcos Palacios y nos quedamos conversando sobre las estilizadas esculturas en piedra de la artista. Con esta muestra se cumple un año de mi visita frecuente a esta galería barranquina. En efecto, desde junio del 2010 hasta junio del 2011, no me he perdido ni una sola de las muestras que se realizan mensualmente. Un brindis por ello.

El jueves fui a la muestra colectiva del trigésimo aniversario de E. Sachs, que se realizó en el Centro Cultural Juan Parra del Riego en Pedro de Osma, Barranco. Con una abundante cantidad de trabajos, tanto de los alumnos como de los maestros, sería difícil comentarlos uno por uno. Allí me encontré con Renzo Núñez Melgar Vega, que a fines de mes presenta su muestra en Miraflores.

Después me fui a Dédalo, y ahí me encontré con Sebastián Kouri, amigo del colegio; nos quedamos conversando un buen rato; también hablé con Augusto Rey que pasó por ahí de casualidad, desde la campaña al congreso nos hemos seguido viendo bastante a menudo y siempre de pura coincidencia, es muy curioso. A la hora de regresar a mi casa me encontré nuevamente con Renzo Núñez; la verdad es que estoy muy impaciente por ver su muestra, he visitado un par de veces el taller y he sido testigo del proceso artístico, desde los bocetos iniciales en el lienzo hasta los primeros colores. Ahora, a fines de mes, me toca ver todos los cuadros juntos.

A pesar de todo, esta ha sido una semana muy desalentadora para mí. Ya había hecho planes, entre ellos viajar a New York para ir a mi primera convención de cómics. Ya me veía firmando autógrafos, haciendo bocetos para los interesados, participando, en fin, de una verdadera fiesta del cómic. Pero, una vez más, me veo obligado a postergar todos mis planes. Tuve dos entrevistas de trabajo con la Cooperación Alemana en abril y en mayo, y ya habían confirmado que me contratarían en julio. Al final, la decisión de la sede en Alemania no fue favorable para mí, y así, de pronto, recibo la llamada esta semana con la mala noticia. Se trataba de un puesto ideal para mí, y la paga iba a ser extraordinaria. Adiós, entonces, a mis planes extraordinarios, al menos por el momento.

En fin, como curiosidad estoy adjuntando un par de de las viñetas de la historia que dibujé para Cal Cleary. En primer lugar está la figura original que presenta algo de desnudez femenina y masculina, obviamente, tuve que reestructurar la imagen digitalmente para adaptarme al guión de Cleary. Una vez lista la nueva versión digital, la usé de modelo para la viñeta superior añadiendo los elementos descritos por el guionista, proceso que constituye dos etapas: la primera a lápiz, desde luego, y la segunda a tinta. Finalmente, utilizando todos los pasos previos llego a la viñeta inferior. Así, de un solo dibujo obtengo dos viñetas y eso me permite ahorrar tiempo y avanzar con las otras. Este tipo de truquitos ha sido especialmente necesario para la historia en cuestión, que presenta nueve viñetas por página. Ahora, definitivamente pueden notar la diferencia de detalles entre la viñeta superior e inferior, ¿cuál les gusta más?


May 23, 2011

Asad López de Castilla en Bruno Gallery

For too many years I was ‘the’ ineffable inedited writer. And to this day I’m still waiting to be published in my own language. Obviously, I am a much better novelist in Spanish than in English; but that doesn’t prevent me from writing as much as I can in both languages, taking advantage of the strengths and particularities of each idiom.
Writing a novel is far more difficult than you could think of. I thought it was supposed to be easy. It wasn’t. In 2002 I started writing something, believing that the aforementioned “something” was going to be a novel. It wasn’t. I found out that you need something more than the good will to do it.

So, in 2006 I felt like I was more prepared for the task. I wanted to stop being the ineffable inedited writer and start being just a writer. Ambitious? Perhaps, but then again I am not claiming to be the best writer, just a writer. This second attempt, a rather autobiographical story, simply didn’t cut it; and I even had the idea of turning this into a trilogy (I had the concepts for two more novels, but we will just have to wait and see if, some day, I can at least pull it off with the first one). Finally, this year I have decided to write a completely new novel, now I just have to find the time to do it.

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Este viernes se inauguró en Bruno Gallery “El universo… una célula”, muestra de Asad López de Castilla. Como artista, Asad está siempre en búsqueda permanente. A veces lo imagino como un científico obstinado buscando las arquitecturas más intrincadas al interior de una célula y encontrando nuevos universos cromáticos en cada molécula. Mediante una prolífica imaginación visual, Asad recurre al cosmos y al microcosmos, con una paleta de colores amaestrada por ese don que sólo el verdadero artista posee.

He visto de cerca el trabajo de Asad, y de hecho he visitado su taller un par de veces en lo que va del año. Pero mi apreciación por su pintura va mucho más allá del hecho de conocerlo. En realidad, ser testigo del proceso de creación me permite hacer comentarios más acertados sobre su obra. Asad logra una increíble riqueza en sus cuadros no solamente por el cuidado casi obsesivo del detalle (se trata de alguien detallista, que cuida hasta la más mínima línea incluso en el diseño de las tarjetas de invitación para la inauguración), sino también por esa vitalidad que transmite, quizá reflejo de esa técnica tan suya de hacer cinco o diez cuadros a la vez, calculando las dosis exactas de pintura para cada matiz y recordando qué aplicar en cada cuadro.

Así que el viernes fue el gran día de Asad y me dio mucho gusto pasar la noche con él y con Renzo Núñez Melgar, artista talentosísimo. Durante el evento elegí solamente vino blanco mientras conversaba con Renzo, Paolo (de mi colegio) y otros conocidos. Después nos fuimos al departamento de una amiga de Renzo, en Larco, y de ahí a Barranco. Aunque me hubiera gustado acompañarlos a la fiesta a la que estaban yendo, el cansancio terminó por vencerme. En todo caso, estoy seguro que la inauguración de la muestra de Renzo (en la Galería Enlace) el próximo mes también será inolvidable.

Otro momento extraordinario fue el sábado en la noche en casa de mi amigo Brian Power. Escucharlo tocar el piano es siempre una maravilla, y además me encontré con María Claudia, a quien no veía desde la fiesta de año nuevo en Asia, en la que nos encontramos de pura suerte, hace un par de años; otra sorpresa fue encontrarme con Alberto Schroth, por esas coincidencias curiosas, resulta que la casa de nuestro jefe de Viceversa Consulting estaba cerquísima de la casa de Power, y Alberto no perdió la oportunidad para hacer bromas con el nombre de la calle “Alameda del Arco Iris”.

En fin, ahora van más imágenes de la muestra “El tesoro de la juventud” en homenaje a Oswaldo Reynoso, actualmente en exhibición en el Centro Cultural de España. La primera, a colores, es de Cristian Bendayán; la segunda corresponde a Asad (para ver más cuadros de Asad pueden revisar los posts del 14 de mayo y del 17 de febrero); la tercera es una maravillosa ilustración en blanco y negro de Sheila Alvarado; y la última es uno de los tantos dibujos que hago en los cuadernos cuando estoy aburrido en clases (por cierto, estoy rescatando dibujos de todas las páginas de mi cuaderno del año pasado que iré colocando aquí de ahora en adelante).